De esta manera, la compañía finlandesa sacude el mercado de redes móviles, convirtiéndose en el fabricante de equipos de telecomunicaciones más grande del mundo.
El monto de esta operación (unos U$S 16.580 millones), la mayor del sector de las telecomunicaciones en más de una década, equivale a más del doble de lo que Microsoft desembolsó para adquirir la unidad de dispositivos móviles de Nokia.
Esto termina de confirmar que la compañía finlandesa está enfocándose en sus divisiones de infraestructuras de telecomunicaciones y de mapas digitales y servicios de localización, aunque hay rumores que indican que estaría por desprenderse de Here.
La operación se realizará mediante una oferta pública de canje de acciones entre ambas compañías, de modo que los accionistas de Alcatel-Lucent recibirán 0,55 acciones de la nueva empresa por cada título de la antigua.
De esta forma, Nokia se quedará con el 66,5% del grupo resultante y Alcatel con el 33,5%, creando un gigante con cerca de 114.000 empleados y unos 26.000 millones de euros de facturación. La nueva compañía se llamará Nokia Corporation, tendrá su sede en Finlandia.
La oferta de Nokia representa una prima de 34% con respecto al valor medio de las acciones durante los últimos tres meses de Alcatel-Lucent, empresa que en 2014 tuvo una pérdida neta de 118 millones de euros.
Según la empresa de análisis de mercados Bernstein Research, cuando concluya la operación, que aún debe recibir las autorizaciones correspondientes, Nokia tendrá una cuota del 35% en el mercado de redes inalámbricas, frente al 40% de Ericsson y el 20% de la tercera en discordia, la china Huawei.
En cambio, si mantiene su actual nivel de ventas superará al fabricante sueco en términos de facturación, ya que las ventas totales de Ericsson en 2014 ascendieron a 24.407 millones de euros, un 6,5% menos que Nokia y Alcatel unidos.
“Juntos, Alcatel-Lucent y Nokia tienen la intención de liderar la próxima generación de tecnologías y servicios de redes”, afirmó en un comunicado el consejero delegado de Nokia, el indio Rajeev Suri.
Nokia calcula que la adquisición de Alcatel, pese a encontrarse en una mala situación financiera, será muy positiva porque ampliará en un 50% su actual negocio de redes y servicios de telecomunicaciones.
Según Nokia, ambas empresas se complementan a la perfección en términos de presencia geográfica y catálogo de productos, lo que creará un grupo con grandes posibilidades de expansión en importantes mercados como Estados Unidos, China, Europa y Asia.
Una vez finalizada la fusión, previsiblemente en la primera mitad de 2016, la nueva compañía tiene intención de reducir sus costes operativos anuales en 900 millones de euros en tres años, lo que probablemente supondrá un recorte de su plantilla actual.
El objetivo de la nueva Nokia es liderar el desarrollo de las futuras tecnologías de la comunicación, entre ellas las relativas a la telefonía de quinta generación (5G), el acceso móvil a Internet y los servicios en la Nube.
En conjunto, Nokia y Alcatel dedicaron en 2014 cerca de 4.700 millones de euros a la investigación y el desarrollo, con una plantilla de más de 40.000 empleados dedicados a estas tareas. Con esta operación, Nokia también adquiere los Laboratorios Bell (fundados por Alexander Graham Bell en 1880).
